Mirad a Brittany Snow a la cara (sí, olvidad por un momento ese escote palabra de honor y el pecho aplastado por un escote apretón). ¿No véis algo raro? A primera vista se aprecian dos cosas: demasiados polvos bronceadores (de la boca hacia arriba, como si se los hubiera echado con máscara de gas) y unos dientes más blancos que la nieve.
Lo bueno para Britany Snow es que ambas circunstancias tienen fácil solución: aprender a maquillarse mejor (o, en su defecto, contratar a otra maquilladora) e ir al dentista a cambiar las mascarillas por un tono más natural. Si pertenece a ese amplio porcentaje de la población que sufre pensando en abrir la boca ante el especialista, siempre puede intentar que la acompañen nuestras hermanísimas favoritas: Pe y Mo Cruz, otras que “brillan” cada vez que sonríen.
De hecho, si todos los famosos que se han blanqueado demasiado los dientes fueran el mismo día al mismo dentista (en plan récord Guinness) podrían celebrar de pronto una gala de los Oscar improvisada. A saber: Hillary Duff, Britney Spears, Angelina Jolie, Jessica Simpson, Eva Longoria…
Todos son fan fatales de Lumineers, un tratamiento blanqueador poco invasivo que ya ha tomado el apodo de “la sonrisa de las estrellas”. Eso sí, aunque hay muchos tonos para elegir (suele depender del color natural de la dentadura), todas estas celebrities se han puesto de acuerdo: lo suyo es el blanco nuclear. Antes muertos que sencillos.
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